Su empresa va a solicitar el aplazamiento de una deuda tributaria. Aunque el aval puede ser costoso, ¿sabe que presenta varias ventajas?
Más fácil y menor interés. Si su empresa solicita el aplazamiento de deudas tributarias por importe superior a 30.000 euros, deberá aportar garantías. Pues bien, aunque aportar un aval o un seguro de caución suponga costes, puede ser la mejor alternativa:
No compensable. Además, al conceder el aplazamiento, Hacienda no podrá reservarse el derecho a compensar las cantidades aplazadas con los créditos que surjan a favor de su empresa en el futuro (por ejemplo, una devolución de IVA). ¡Atención! En los aplazamientos sin garantías o con garantías menos líquidas (como una hipoteca inmobiliaria), Hacienda sí puede efectuar dicha compensación.
Varios avales. En caso de deudas de cuantía importante y en las que se fraccione el pago en varios plazos, podrá aportar un aval para cada uno de dichos pagos. Apunte. De esta forma podrá ir liberando los avales a medida que se vayan realizando los pagos (en lugar de tener que esperar a tener liquidada toda la deuda), y reducirá las comisiones bancarias aplicables sobre la garantía.