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10/05/2016 | Soria | ABACO SORIAL S.L.

Arabia Saudí ve peligrar su reinado como principal proveedor de crudo del mercado asiático

Economía y empresa

Rusia e Irán están robando cuota de mercado a Arabia Saudí en China, Corea del Sur, Japón y la India.

La monarquía Saudí está perdiendo su papel de principal proveedor asiático, uno de los mercados que más crudo consume en todo el mundo.

El hasta ahora ministro de Petróleo de Arabia Saudí, Ali al-Naimi, ha dejado su cargo en un momento en el que se está endureciendo la competencia por el mercado asiático con países como Rusia e Irán. El estado árabe había mantenido una posición predominante durante décadas sobre China, Japón e India.

Ali al-Naimi fue substituido el pasado sábado por Khalid al-Falih debido a los problemas de la caída continuada del precio del petróleo durante los dos últimos años y a los que no pudo poner fin.

El incipiente repunte de los precios del petróleo ha aliviado a Arabia Saudí y a la Organización de los Países Exportadores de Petróleo, cuya política es manejada por el reino. En febrero, los precios del crudo de Estados Unidos subieron más de 70% desde que llegaran a su mínimo histórico de los últimos 12 años de 26 dólares el barril (unos 22,8 euros).

La recuperación del precio del petróleo se ha producido a pesar de que el mes pasado la OPEP y otros productores de crudo no pudieron llegar a un acuerdo para congelar la producción.

Los analistas dicen que Falih probablemente mantenga la política de salvaguardar la cuota de mercado de Arabia Saudí, incluso si esto significa contribuir a la sobrecarga de la oferta mundial. Desde que los precios del petróleo empezaron a caer, a mediados de 2014, Arabia Saudita ha resistido la presión de los miembros más pequeños de la OPEP para recortar su producción.

Según los analistas de la firma de investigación Energy Aspects "Falih ha dejado muy clara su posición respecto a los recortes unilaterales o la congelación de la producción".

La política de no congelación de la producción ha tenido un éxito relativo en Asia, cuyas refinerías todavía se abastecen en mayor medida de los productores de Oriente Medio, a menudo con contratos a largo plazo. China, el mayor importador de petróleo de la región, compra más crudo a Arabia Saudita que a ningún otro país.

Caída de las importaciones a China y Japón
En el primer trimestre de 2016, las importaciones de petróleo de China crecieron un 13,4% interanual, hasta alcanzar los 7,3 millones de barriles por día, mientras que sus importaciones de Arabia Saudí crecieron sólo 7,3%, según datos de aduanas. En este sentido, Arabia Saudí bajó su importación a China del 15,9% al 15%.

En el mismo período, las importaciones chinas de petróleo ruso aumentaron 42% y representaron 13% del total del trimestre frente a 10,6% del año anterior.

Según el analista de BMI Research, Peter Lee, "la proximidad geográfica de China con Rusia le da al gigante ruso una clara ventaja competitiva frente a otros productores". El crecimiento de la demanda de crudo de Rusia ha sido impulsada por las refinerías independientes conocidas en China como "tazas de té", que en el último año han recibido más libertad de acción por parte de Beijing para manejar sus importaciones de crudo.

Además de competir con fuerza en el precio, los proveedores rusos están tratando de hacer más atractivo negociar con ellos. Este año, a estatal Gazprom Neft permitió a sus clientes chinos que pagaran el crudo con yuanes en lugar de dólares, la moneda de referencia en las transacciones petroleras.

Los saudíes también están perdiendo cuota de mercado en Japón. En marzo de este año el crudo saudí representaba el 33,7% de las importaciones japonesas de petróleo, frente al 37,6% del mismo mes del año pasado. La cuota del petróleo ruso en las importaciones japonesas creció un punto porcentual hasta el 7,6%, según datos del gobierno.

Competencia por el mercado indio
La competencia entre Rusia y Arabia Saudí también se está calentando en la India, donde los analistas esperan que la demanda de crudo crezca con fuerza. Según datos de la consultora FGE, el reino suministra una quinta parte de las importaciones de este país.

La petrolera estatal rusa Rosneft planea empezar a hacer entregas regulares de crudo a la segunda mayor refinería de la India este año. Esto obedece a la decisión de Rosneft de comprar una gran participación en la compañía india Essar Oil, que es propietaria de la refinería y de una red de cerca de 2.000 estaciones de servicio. Se estima que la tendrá lugar este mismo año.

En los últimos meses, Irán ha emergido como otro rival clave para los saudíes. La nación persa, a la que este año se le levantaron sanciones internacionales, ha empezado a aumentar nuevamente sus exportaciones de petróleo. Los analistas calculan que Asia será un importante campo de batalla, donde Irán tratará de sacar participación de mercado a los saudíes y otros grandes proveedores.

Irán ya ha aumentado su presencia en algunos mercados asiáticos. En lo que va del año, la participación de sus exportaciones a Corea del Sur ha pasado a ser del 8,6%, más del doble que la de todo 2015, mientras que la cuota de mercado de Arabia Saudita cayó. La nación persa también ha aumentado su cuota de mercado en India.

"Irán es definitivamente una amenaza para Arabia Saudí, en particular en el mercado asiático", dijo Gao Jian, analista de SCI Internacional, con sede en Shandong. "Esto significa que es aún menos probable que Arabia Saudita ralentice el ritmo de producción, ni qué hablar de ponerle freno".