El Ibex, en las primeras horas de sesión, entra y sale repetidamente de números rojos. Sin un rumbo claro, el índice selectivo intenta salvar los 6.500 puntos. Santander y BBVA, rebajados ayer por Fitch, se esfuerzan en frenar su correctivo, mientras que Telefónica impulsa los avances. En medio de los temores a un nuevo rescate de España y a una posible salida del euro de Grecia, los inversores vuelven a vender deuda española. Las ventas se frenan después de que la prima de riesgo superara los 530 puntos básicos, el bono rozara el 6,7%, y los seguros de impago (CDS) bordearan récords por encima de los 600 puntos.
Los mercados no encuentran un rumbo claro, después del clima de tensión que se vivió en la sesión precedente. La jornada de ayer pasó de la euforia inicial al clima de máxima incertidumbre que genera la situación en Europa, con especial énfasis en España y en Grecia. Las elecciones del próximo domingo en el país heleno reavivan las especulaciones sobre su posible salida del euro, y sobre un hipotético "corralito". En España las ayudas a la banca, lejos de frenar las alertas sobre la deuda española, las ha reactivado, hasta el punto de aflorar la opción de un eventual segundo rescate. De paso, los mercados vuelven a poner también a Italia en su punto de mira.
Las dudas sobre la eurozona se reflejan en el mercado de divisas. El euro cotiza por momentos por debajo del umbral de los 1,25 dólares. Su caída pasa factura al mercado de commodities. El barril de Brent pasa de los 102 dólares que rozó a primera hora de ayer hasta los 97 dólares. El oro, por su parte, se mantiene cerca de los 1.600 dólares la onza.
Gran parte de las miradas de los inversores, y de la inquietud, se traslada al mercado de deuda pública. La sesión de ayer incluyó una impactante subida de la prima de riesgo española, desde los 465 puntos con los que recibió inicialmente el rescate de la banca hasta los 520 puntos finales. Tras una minitregua inicial, repunta por encima de los 530 puntos. Las ventas de deuda española, a la espera de resolver los detalles del rescate de la banca, elevan el interés del bono a diez años cerca incluso del 6,7%. En el mercado de derivados las alertas dejan los credit default swaps (CDS) de España en zona de máximos históricos, por encima de los 600 puntos, los que supone que el coste de asegurar 10 millones de euros de deuda española a cinco años supera los 600.000 euros.
Con este incierto panorama, y con las referencias bajistas de Wall Street y de las bolsas asiáticas, la renta variable europea encara la jornada con dudas. El Ibex, en el arranque de la sesión, entra y sale repetidamente de números rojos, con los 6.500 puntos como referencia.
Todo un peso pesado como Telefónica contribuye a minimizar las presiones bajistas. El sector financiero, lastrado por las tensiones en la deuda, encuentra mayores dificultades para sumarse, con claridad, a los avances. En las caídas sobresale Gas Natural, ante la posibilidad de que La Caixa y Repsol reduzcan su participación en la empresa energética.